Tendencia de las tasas de interés para México y América Latina
El viernes 2 de septiembre la tasa interbancaria a un día no se movió de 4.50%, nivel donde se encuentra desde hace 25 meses, para intentar dinamizar la actividad económica en un leve entorno inflacionario, con una inflación acumulada de 3.49% en los 12 últimos meses, dentro de los parámetros del objetivo del 3% anual más o menos un punto porcentual del Banco Central de México.
Por ahora el Banco Central de México mantiene una política monetaria neutral y no habrá recorte a la tasa de interés referencial.
En un comunicado el ente bancario señala que, si el desempeño de la economía nacional y de los mercados financieros internacionales resultaran en un endurecimiento innecesario de la política monetaria, la junta de gobierno (del banco) reflexionará acerca de la conveniencia de ajustarla. Esto deja clara su preocupación por el frágil estado de la economía nacional y las turbulencias financieras internacionales, lo cual podría causar que la entidad en un futuro recorte de la tasa de interés referencial.
Si tomamos en cuenta que los bancos centrales de América Latina fueron los más agresivos a nivel mundial en subir las tasas de interés tras el fin de la crisis financiera global, entonces les deja un margen para bajar las tasas nuevamente, si fuese necesario.
Además “La probabilidad de una nueva crisis externa en los próximos meses ha aumentado (…), podríamos ver recortes de tasas, los bancos centrales van a ser cautos y van a ir despacio”, según Alfredo Coutiño, director para América Latina en Moody’s Analytics.
Por tanto, las tendencias de las cotizaciones de los mercados de futuros y las estimaciones de los economistas apuestan por futuras rebajas en Brasil, Chile y México.
Así que todavía se vislumbra estabilidad en torno a las tasas hipotecarias, pero la dinámica económica nacional, regional y mundial apuntan a una futura baja de las tasas.
En caso de una desaceleración económica, subiendo el desempleo y frenando los aumentos de sueldos, aún con tasas de interés más baja, ¿cómo quedarían las ventas de casas y departamentos?